Y solo hay una forma de aprender a calibrar: practicando, acumulando un montón de experiencias y siendo observador. No vas a mejorar en este aspecto por mucha teoría que te leas o bien por muchos blogs de comunicación noverbal que estudies si no practicas nada.
Me muerdo el labio nerviosamente mientras la recepcionista me muestra la habitación, preguntándome si sabe lo que está a punto de suceder. Preguntándose si hay algún juicio tras la expresión agradable y profesional de su cara.
En el fondo se van a ir guardando toda esta serie de actitudes desagradables y molestas que con el tiempo brotarán en la primera discusión haciéndose obvias y empleándose como armas de defensa en el pleito.
Es aconsejable que hombres y mujeres hagan sus necesidades fisiológicas antes de tener relaciones íntimas para eludir situaciones incómodas e inoportunas. Se aconseja cuidar la dieta 24 horas ya antes del contacto anal y el uso de duchas o enemas para realizar una limpieza profunda.
Si además de esto conseguimos mudar nuestros sentimientos y repetimos de manera regular estas oraciones, en poquísimo tiempo experimentarás unos cambios espectaculares, no solo el de qué forma te sientes sino van a disparar tus resultados.
Entonces, esas personas acostumbran a portarse de manera impecable. Saben qué decir en el instante justo (salvo si te señalan donde está el lavatorio), nunca meten la pata, nunca quedan mal, jamás se emborrachan, nunca se comportan inadecuadamente, jamás se equivocan…
La verdad es que si el hombre desea hacer el amor por periodos de tiempo más largos y cosechar los auténticos beneficios del sexo, entonces el nivel de excitación debe reducirse drásticamente y la eyaculación debe posponerse conscientemente.
Aprender a dar solo lo que uno desea dar sin aguardar es una habilidad que se debe practicar. Si eres de las personas que lo han practicado, tienes más probabilidades de localizar y sostener a tu pareja.
Procura cuidar la armonía de la situación, de nada vale un cuerpo limpio si se recostase sobre un cubrecama sucio, el enfoque ha de estar en crear una experiencia única y la clave para crearla es sumar notas positivas en cada uno de ellos de los detalles que conforman esa experiencia.
Cada castillo tiene sus entradas y sus salidas secretas, sus pasadizos, sus mazmorras, sus puntos fuertes adonde llevar al oponente a fin de que intente entrar por ahí por el hecho de que no lo va a lograr, sus puntos enclenques que resulta conveniente vigilar y no dar opción a que las amenazas vengan por ese flanco.